viernes, 19 de agosto de 2011



viniste a mi mundo cuando estaba en guerra
llegaste cuando no tenía más sentimientos que el  dolor
ni más necesidad que la  sobrevivencia
viniste cuando yacía sola y abandonada a mi suerte
no pude enfrentarme a la vida que me ofrecías
todo en mi mundo era desolación , destrucción y oscuridad
una oscuridad tan espesa, tan confusa, tan real como lo eras tú mismo
en mi corazón hay una luz pequeñita, apenas apreciable en donde te escondí
para no olvidar que una vez
un ser divino quiso guiarme con el destello de su alma
y mis miedos  hizo apagarla, antes  que su resplandor me salvara

 por Reidi

No hay comentarios: